La Comisión de la Verdad, Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad, la Convivencia y la No Repetición, creada por el acuerdo de paz entre el Gobierno colombiano y la guerrilla de las FARC, ha entregado la primera parte de sus conclusiones finales, en un acto en el teatro Jorge Eliécer Gaitán, de la capital, Bogotá
“El informe es una narrativa que no pretende ser la historia de Colombia sino la entrada a una conversación sin miedo sobre la nación que somos”, manifestó el presidente de la Comisión, el jesuita Francisco De Roux.
Aquí algunos apartes de esta intervención:
“Que la verdad fuerte que ustedes entregan nos lleve a la reconciliación, que podamos quedarnos juntos en este país bello, dispuestos a cambiar para que todos seamos posibles. Que no nos vaya a llegar la partida estando los unos separados de los otros…
Pedimos a la sociedad el compromiso de asumir un cambio profundo en los elementos culturales que nos llevaron a la incapacidad de conocer al otro y la otra como seres humanos de igual dignidad…
No podemos postergar, como ya hicimos después de millones de víctimas, el día en que «la paz sea un deber y un derecho de obligatorio cumplimiento», como lo expresa nuestra Constitución…
A las naciones amigas pedimos ayudarnos a hacer de Colombia un ejemplo de la reconciliación, dejar de vernos como un país que necesita armas para sobrevivir en el conflicto. No nos den nada para la guerra” …
Pedimos a un Ejército que ponga el honor en la paz, donde las medallas no sean por cadáveres sino por personas vivas culpables o inocentes para la justicia restaurativa…
Pedimos a los estamentos de justicia frenar la impunidad y garantizar la transparencia de los estamentos de investigación y juzgamiento…
A las organizaciones armadas que no aceptan la legitimidad del Estado les pedimos escuchar el clamor del pueblo que pide parar la guerra ya, de todos los lados…
Pedimos mirar críticamente la historia y la lucha por la paz para hacer posible la no repetición…
Pedimos a todos los estamentos sociales y políticos profundizar la democracia mediante la exclusión definitiva de las armas del escenario de lo público, la participación incluyente y deliberativa y el respeto a la movilización como expresión de derechos…
De igual manera De Roux hizo referencia, además, al Estado como uno de los grandes responsables de los asesinatos sistemáticos que dejó el conflicto armado, remarcando las ejecuciones extrajudiciales que dejaron a 6.402 muertos entre 2002 y 2008.
El presidente electo de Colombia, Gustavo Petro asistió al evento y de manera emotiva se refirió en los siguientes términos:
“La verdad tiene un sentido que no es el de la venganza, sino que es el del diálogo, el acuerdo, la convivencia y la reconciliación. Estas recomendaciones se volverán eficaces en la historia de Colombia para la no repetición del conflicto armado”.
Por otro lado, la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, ha comentado esta primera entrega de la Comisión de la Verdad de Colombia, recalcando que “los procesos de justicia transicional” son “los instrumentos más poderosos para superar los conflictos y romper los ciclos de violencia e impunidad”.